lunes, 11 de junio de 2012

El "Cacha" Arévalo Ríos es pura sangre

Práctica a puertas cerradas. Fútbol ante la Mutual y ante Bella Vista. Lluvia persistente, por momentos torrencial. Sábado 29 de mayo de 2010. Cancha 4 del Complejo Celeste. "Con línea de tres y una sorpresa", tituló al otro día Ovación. Y la sorpresa era la inclusión, por primera vez en el camino rumbo a Sudáfrica, de Arévalo Ríos como titular.
El "Cacha" se había ganado la citación a la selección con una notable campaña en Peñarol. Y de ahí a ser titular en el Mundial, el camino fue bastante más corto de lo esperado. Arévalo Ríos fue titular en los siete partidos de Sudáfrica 2010, el Mundial que cambió la historia del ciclo Tabárez. Y ya nadie lo podrá sacar; se ganó el mote de indiscutible e intocable en el mediocampo de la selección.
Además, cuida esa condición en cada partido. La agranda quite tras quite. Lo demostró ante Perú. No hace goles -de hecho es el único de los titulares, junto a Muslera, claro, que no ha convertido en la era Tabárez-, pero su producción ha sido determinante para que hoy la selección uruguaya sea lo que es.
No tiene tanto cartel, como el resto. No juega en un grande de Europa; ni siquiera lo ha hecho en ese continente a lo largo de su carrera. Pero está ahí, en la mitad de la cancha del campeón de América, por mérito propio.
Esta vez, hizo ocho quites, siendo el mejor de la selección en ese rubro. Y, además, manejó correctamente la pelota, con 22 pases correctos y sólo dos que no llegaron a los pies de algún compañero. Descomprimió el juego varias veces con cambios de frentes precisos y a la hora de defender cubrió un amplio sector de la cancha, con relevos adecuados cuando los Pereira, carrileros, surcaban las bandas.
En determinado momento, recibió un golpe y quedó tendido en el piso, con sangre hasta en la camiseta. Se levantó, se cambió y volvió a entrar, rápidamente para cortar un ataque peruano ante la explosión del Centenario.
Arévalo Ríos no ha podido dar el salto que merece su carrera. Fue figura de Uruguay en el Mundial y sonó para infinidad de equipos en Europa; pero siguió seis meses más en Peñarol. Fue figura en la Copa América y dijeron que estaba vendido al Palermo de Italia; pero siguió en Tijuana.
Difícilmente el "Cacha" juegue para un 9 o un 10 de los diarios. Pero generalmente tampoco lo hace para menos de 6. Con la Celeste en el pecho, ha sido uno de los jugadores más regulares desde aquella tarde del 29 de mayo de 2010, cuando el "Maestro" Tabárez lo puso de titular ante la Mutual, a puertas cerradas y bajo la lluvia, preparándose para el Mundial que cambió a la selección uruguaya.

LAS CIFRAS

8

QUITES de pelota hizo el "Cacha" en el partido, el mejor en ese rubro.

22

PASES correctos hizo el volante de los Xolos de Tijuana. Solo falló en dos pases.

0

GOL ha convertido con la selección uruguaya, pero tiene varias asistencias.

SU CARRERA ESTÁ PARA EL SALTO DE CALIDAD

De entrecasa

Arévalo Ríos nació el 1° de enero de 1982 en Paysandú. Debutó a nivel profesional en 1999, con el Paysandú Bella Vista. Luego de dos temporadas, pasó a Bella Vista y de allí a Peñarol, en 2006.

A México

Tras una temporada con los aurinegros, tuvo su primer pase al exterior, siendo transferido al fútbol de México, a Monterrey.

Idas y vueltas

En 2008 Danubio le dio los minutos que necesitaba. Luego regresó a México, a San Luis, y en 2010 volvió a Peñarol, a préstamo. Luego pasó por Botafogo de Brasil y hace un año está en Tijuana.
Ovación

lunes, 4 de junio de 2012

"La gente está acostumbrada a que siempre venís ganando"


Egidio Arévalo Ríos fue uno de los jugadores de la Selección uruguaya que habló en la conferencia de prensa, realizada luego del entrenamiento celeste.
El "Cacha" dijo que "La gente está acostumbrada a que siempre venís ganando, sea el Mundial, la Copa América, o estar segundos en el ranking FIFA".
El volante sostuvo que "nosotros estamos tranquilos preparándonos para el partido con Perú con las mejores condiciones".
Sobre el rival del próximo domingo, Arévalo Ríos dijo que "es un partido muy duro, lo enfrentamos dos veces en la Copa América y son complicados, pero es de suma importancia, hay que generar muchas situaciones de gol, ellos tienen jugadores importantes de mitad de cancha para adelante".
Sobre el estado del campo de juego el volante central dijo que "yo no me puedo quejar de la cancha, jugué desde mis inicios en peores canchas, no hay excusas, tenemos que hacer lo mejor posible e intentar ganar".
Frente a Perú el maestro Tabárez no contará con su capitán Diego Lugano, sobre esta ausencia el jugador dijo que "Diego es un referente para nosotros, habla mucho en el fondo, nos ordena, y quizás perdemos el habla de atrás que es importante, pero el que entre lo va a hacer de la misma forma".
Por último, habló sobre el bajo rendimiento que mostró la Selección en el partido pasado y sostuvo que "terminamos corriendo, eso es importante, es preocupante cuando no terminás corriendo, fue una mala tarde nada más, no hay que dramatizar".
Fuente: Ovación

sábado, 2 de junio de 2012

Fuiste vos, Cacha

Egidio Arévalo Ríos fue el mejor jugador de Uruguay en el empate 1-1 con Venezuela. El “Cacha” fue el más regular durante los 90’ del encuentro. Principalmente en el complemento: el peor momento de la “Celeste” en el partido.Como es característico a su juego, el “Cacha” dejó todo y trató de cumplir sus dos funciones claves: anticiparse a los delanteros y distribuir la pelota de forma rápida.
En la primera parte el “Cacha” no tuvo tanto trabajo, ya que Venezuela tuvo un juego más especulativo, pero siempre se mantuvo muy atento para recuperar el balón y presionar al rival.
El volante se destacó principalmente en el complemento, el peor momento de Uruguay en el partido, marcando como un león y distribuyendo de buena forma la pelota, a través de buenos pases y cambios de frente. En el Centenario se pudo ver la buena técnica que posee Arévalo Ríos a la hora de soltar la pelota.
Hubo poco para destacar en este partido de Uruguay. Una vez más no vence a Venezuela y, nuevamente, no va a poder sumar los seis puntos seguidos que tiene de local (Venezuela y Perú).
Fuente: Quenonino.

viernes, 1 de junio de 2012

Solo faltás vos, Egidio

Allá por julio de 2011, cuando Uruguay sembraba las primeras dudas en la Copa América luego de empatar en su debut contra Perú, el técnico Óscar Washington Tabárez dejó los puntos bien claros: “Tenemos tres delanteros de elite y mi idea es tener a los tres en cancha. Debemos acostumbrarnos a jugar con ellos”. El tiempo le brindó la razón. El gol en Uruguay es sinónimo de: Suárez, Forlán y Cavani.

Pero al margen de que la mayor parte de las conquistas de los celestes fueron convertidas por el trío más temido de América apenas cuatro de los 22 jugadores de campo convocados por Tabárez para los juegos con Venezuela y Perú no festejaron goles y solamente uno de los que integra habitualmente la oncena titular: Egidio Arévalo Ríos.

Evidentemente, para que la mayor parte de los profesionales que conforman un grupo seleccionado pueda llegar a convertir se necesita de un proceso de largo plazo que desemboca en la continuidad de los futbolistas. No hay otra forma. 

Muchos de los goles de Uruguay, como fue reseñado en su momento por El Observador, fueron producto de acciones de pelota quieta. A ello se llega por el conocimiento y obviamente por la continuidad. 

El ejecutante conoce perfectamente el lugar donde debe poner la pelota y el que va a buscar ya tiene clara la forma en que le pegará su compañero.

Aporte de los que marcan
Por eso no llama la atención la cantidad de goles que aportaron los defensas. 

De 2006 a la fecha llevan convertidos 14 goles, mientras que los volantes contribuyeron con 19 de las 131 conquistas del proceso del Maestro. Entre ambas líneas del equipo, acaso las que menos llegan al gol por la función que deben cumplir en cancha, colaboraron con 33 tantos lo que equivale al 25,1%.

El capitán Diego Lugano aportó su cuota. El zaguero se hace sentir cada vez que va al área a buscar un cabezazo. Que se le pregunten a Maradona que afirmó cuando dirigía a la selección de Argentina: “En el juego aéreo nosotros sabíamos que había que ir a Lugano porque Lugano no le mira la cara ni a la madre”.

Su compañero de zaga, Diego Godín, también colaboró con lo suyo. Cáceres se sacó la mufa en el amistoso previo a la Copa América, jugado en Rivera, contra Estonia. 

En el medio, el Ruso Diego Pérez marcó el vital gol ante Argentina, por los cuartos de final de la Copa América en la ciudad de Santa Fe, y Álvaro Pereira es otro que llegó con facilidad al arco rival.

Falta Egidio
Pero lo que pocos saben es que hay un solo jugador de los habituales titulares que, en lo que va de la era Tabárez, no celebró jamás una conquista: Egidio Arévalo Ríos.

El volante de Tijuana, que es un canto a la entrega y a la regularidad, todavía no pudo convertir con la celeste. 

Egidio ha sido fundamental a lo largo del proceso. Al margen de su producción en el campo de juego se debe destacar que muchos goles nacieron como consecuencia de su gestión. 

Vale el recuerdo de la asistencia para el gol de Forlán contra Alemania en el Mundial de 2010. O la presión que ejerció contra Paraguay en la final de la Copa América del año pasado para meter otra asistencia perfecta para el gol de Forlán.

Arévalo está noveno en la lista de asistencias del proceso del Maestro. 

A los pases reseñados a Forlán en el Mundial y en la Copa América se debe sumar otro en el último juego de las Eliminatorias, contra Chile en el Estadio Centenario, donde una vez más presionó y robó una pelota para entregar a Suárez.



Egidio espera su gol. No se desespera. Pero tiene claro que es el único al que le falta celebrar.  


Fuente: El Observador